La semana pasada tuvo lugar en el Espacio Multifuncional el Tranvia, en la cuesta, la Semana de la Montaña, organizada por la Federación Tinerfeña de Montañismo.
Voy a hablar un poco de las charlas a las que pude ir, que fueron las 2 del jueves y la segunda del viernes. Las de Román Morales y de María Benitez ya las había visto en pirámides y me quedé con las ganas de las del miércoles, pero no pudo ser.
El jueves comenzó con la charla sobre la Tenerife Blue Trail. Después de una introducción, se comentaron detalles de la carrera, y se intentó poner el video grabado para una cadena de televisión canaria. Digo intentó porque el ordenador no quería funcionar y poner la peli. Tras varios minutos de pelea, se logró poner, pero la alegría sólo duró unos 20 minutos, porque luego se negó en rotundo, y el ponente continuó narrando como terminó la carrera. Yo la verdad es que siempre he sido crítico con esta carrera, los orígenes de la misma hay que buscarlos en la "CruzaTenerife", carrera que salía de Guimar para llegar a Garachico, la organizaba un conocido, y ya llevaba 5 ediciones. En su recorrido pasaba de modo disimulado por el Parque Nacional de El Teide, desde Izaña hasta el cruce de El Portillo por carretera (porque no le dejaban que pasara por senderos ni pistas), para seguir hacia la Orotava y desviarse a 2 km del cruce para coger las pistas que cruzan el norte de la isla, ya fuera del parque. Todo eran problemas, pues ni tiendas, ni arcos para control de corredores,....Y llega el Cabildo y toma la idea de una gran carrera, para hacerla muy famosa, con un gran presupuesto, unos 90.000 € según el ponente de hoy. Y claro, en el Teide lo que haga falta, tiendas grandes, pasar por pistas, senderos, ..... A mi juicio una clara discriminación.
El problema era que dos grandes carreras en un mes de diferencia en Tenerife, no tienen cabida, lo que propició la desaparición de la Cruza. Y ahora, con la crisis, dicen que probablemente la Blue Trail, como no hay dinero para mantenerla, también desaparezca. Veremos que pasa en 2012 con la larga distancia en Tenerife. Espero por el bien de los corredores que una u otra salga adelante.
La segunda charla del día corrió a cargo de Felix Molowny y en ella nos iba a narrar sus "Impresiones de un sueño", su intento de ascenso al Cho-Oyu y sus vivencias en dicha montaña. La verdad es que me gustó su manera de narrar la historia, muy personal. A los que hemos estado en grandes montañas nos hizo vivir y recordar buenos y malos momentos. La verdad es que la montaña y los chinos no le dieron muchas opciones de cumbre, con muchas jornadas de mal tiempo, mucha nieve y los problemas de equipamiento de las cuerdas de la montaña, que según los chinos ya estaban puestas. Es lo que tiene este deporte, muchas variables a tener en cuenta, además del tiempo limitado del permiso de ascensión y de la fecha de regreso. Pero sin duda alguna, la experiencia adquirida por Felix, hará que en un futuro nos de mas de una alegría.
Cho Oyu 8.201 mts
El viernes llegué justo cuando estaba comenzando la segunda charla, a cargo de Jorge Parra sobre "Escalada en el desierto". Nos contó las aventuras que vivió junto con Santi y Gitano en Jordania, en el que tuvieron tiempo de escalar, convivir con lo lugareños, hacer turismo y hasta plantarle cara a una tanqueta militar. Bromas aparte, la descripción y las impactante imágenes de el desierto de Wadi Rum y de las vias que escalaron nos hicieron sentir el calor que se tenía que vivir mientras trepaban en las paredes de arenisca que conforman esa extraña formación.
Parte del macizo de Wadi Rum
También vivimos la sensación de vacío con las fotos mientras estaban en la tapia; de soledad al escalar en un sitio en el que sabes que o no hay nadie más, o hay muy poca gente; de cansancio al empezar sobre las 3 de mañana al levantarte y llegar al "hogar" cuando ya se ha puesto el sol.
La parte de turismo también se hizo amena, con la visita a Petra y el "descuento" en la entrada, la visita al Mar Rojo,....
En definitiva, una charla muy amena y muy adictiva, pues más de uno seguro que salió de allí pensando en visitar Jordania.
En resumen, unas buenas jornadas con unas buenas charlas, aunque con poco público.
Para mí, aparte de las charlas, lo mejor fue coincidir con gente que hacía bastante tiempo que no veía, y compartir una rato agradable con todos ellos.